Tesis Doctoral

No necesariamente hay que tener un Máster antes; no es obligatorio.

De hecho el Máster es algo relativamente moderno, y su popularidad ha surgido fruto de la inflación educativa. Esa inflación educativa (la necesidad de tener cada vez más estudios para el mismo salario) ha sido generada por el Plan Bolonia (más facilidad para aprobar), sumado a la posibilidad de acceso a la universidad de un mayor espectro de población.

Si bien el hecho de que ahora más gente tenga la posibilidad de estudiar en la universidad es algo bueno (tanto para ellos como para una sociedad capitalista que tiende a un mayor grado de sofistificación y por tanto a necesidades de mano de obra con mayor especialización de conocimiento), la contrapartida es que hay más oferta laboral cualificada, y por tanto el salario de equilibrio de un profesional cualificado no es el mismo que por ejemplo en los años 80. En otras palabras: si un ingeniero en los años 80 vivía como Dios y hoy día vive como poco más que un mendigo (y para ejemplo estoy yo, que soy ingeniero aeronáutico y tengo mejor calidad de vida redactando tesis doctorales que diseñando aviones).

Pero antiguamente no había tanta gente con Máster, porque con sacarse una Licenciatura ya les sobraba para conseguir un buen puesto de trabajo.

* el “Grado” como lo conocemos hoy día surgió de la fusión de la Diplomatura, que era una carrera de 3 años (enfermería, arquitecto técnico, etc.) y la Licenciatura de 5 años (por ejemplo medicina).

Y ahora no sirve solo con un Grado, por lo que hay que seguir diferenciándose con un Máster.

Resultado de todo esto: más coste de matrícula, a pasar por caja y más emprobrecimiento para a fin de cuentas tener el mismo grado de diferenciación laboral que tenía antes una persona con una “simple” licenciatura.

¿Y a cuento de qué viene todo este rollo? (se estará preguntando…)

A lo que quiero llegar es a que la exclusividad que antes le daba a uno el Máster, ahora ya no es tal. El título de Máster se ha degradado bastante a nivel de marca personal, ya que cuantas más personas tengan algo, menos exclusivo es. Resultado: el “pack Grado + Máster” no garantiza en sí mismo una diferenciación efectiva en el mercado laboral.

Resultado derivado (consecuencia final): si yo fuese un constructor de los años 80 y tuviese que contratar a un arquitecto, tendría para elegir quizás a 3.000 personas en toda España, teniendo que pagarles acorde a la oferta de arquitectos (escasa). Y ahora en 2023 como en España ya no hay 3.000 sino 50.000 arquitectos (literalmente) para aproximadamente la misma población, pues con pagarles un cuenco de arroz (previo descuento del IRPF, claro está), el constructor ya se asegura tener la plaza cubierta.

Segundo resultado derivado: ahora la gente, para subir su nivel de certificación académica y poder seguir subiendo en la pirámide de diferenciación para el mercado laboral, se está empezando a sacar el Doctorado. Antes el que se sacaba el Doctorado era con fines meramente académicos (para ser profesor de universidad y poco más), pero hoy día, el Doctorado es un escalón más arriba en la colección de estudios. A día de hoy, el Doctorado es el único título académico que sigue siendo visto a ojos de los demás como algo realmente distintivo de los demás.