Sí, tanto contratarlo como dar este servicio es totalmente legal.

Además somos una empresa legalmente constituída y cumplimos con todas las obligaciones a las que está sujeta una academia universitaria privada.

De hecho, aparte de ser legal, desde nuestro punto de vista es hasta ético, ya que es un sinsentido obligar a una persona adulta a malgastar 300 horas en escribir un trabajo que no le va a aportar nada, ni intelectual ni profesionalmente, pero obligatorio (impuesto desde la UE a través del Plan Bolonia) para poder obtener un título con el que acceder a un mercado laboral cualificado.

Y desde luego, la mercantilización de la universidad no es algo que hayamos inventado nosotros, ni tampoco es una práctica que se acote únicamente a los trabajos por encargo (véanse las universidades privadas, o los chiringuitos que hay montados en torno a las publicaciones científicas). Por nuestra parte no tenemos nada en contra de ello, pero que tampoco le vengan a usted con moralinas hipócritas por el simple hecho de encargar un trabajo que no le aportaría ninguna habilidad si lo hiciera por su cuenta, y cuyo contenido tampoco le interesa a nadie.

Por nuestra parte damos todas las garantías por escrito, tanto de calidad como de plazos.

Y es totalmente confidencial: ni siquiera el profesor que le asignemos sabrá quién es usted o en qué universidad estudia. Todos nuestros profesores tienen además firmado un contrato de confidencialidad con nosotros (y en consecuencia, ese mismo compromiso lo tienen también con los clientes). Tampoco trabajamos con profesores que tengan cualquier tipo de relación con alguna universidad española, para preservar así la privacidad del cliente.

A lo máximo que se expondría usted es a ir en contra del reglamento interno de su universidad, y solo en el caso de que en éste figurase expresamente la imposibilidad de recibir ayuda privada. Pero incluso ese caso es prácticamente imposible de que ocurra, ya que nosotros somos absolutamente confidenciales y no comunicamos nada a nadie. En los más de 10 años que llevamos dando este servicio a más de 8.000 clientes, nunca ha pasado nada, porque tenemos todos esos aspectos controlados.

Imposible. Para formar parte de nuestro equipo de profesores es requisito obligatorio que no se esté trabajando en ninguna universidad española.

Rechazamos todos los candidatos a profesor que tengan o hayan tenido relación con cualquier universidad española, a pesar de que muchos de ellos tienen muy buen CV.

El motivo es sencillo: lo primero para evitarles a ellos mismos un posible conflicto de intereses, y lo segundo y más importante, para salvaguardar la privacidad y confidencialidad de nuestros clientes al 100%.

Frente a escribirlo uno mismo, básicamente son tres beneficios:

1. Poder presentarlo en la actual convocatoria (hacer un proyecto de este tipo por uno mismo lleva meses, y a muchos clientes, si lo hicieran por su cuenta no les daría tiempo a presentarlo en esta convocatoria). Eso se traduce en obtener el título antes, y por tanto empezar antes a trabajar en un puesto cualificado (empezar antes a ganar más dinero).

2. Ahorrarse las 300 horas de media que se tarda en hacer un TFG o TFM, para poder emplearlas en cosas realmente útiles.

3. Ahorrarse el dolor de cabeza, el estrés y la frustración que supone la redacción de un documento que desde antes de ser escrito ya se sabe que a nadie le va a interesar, y que es un mero trámite burocrático para poder obtener un título con el que aspirar a un empleo cualificado.

Todas las que cualquier cliente espera: de calidad, de puntualidad, de originalidad, antiplagio, etc.

En la hoja de presupuesto se las detallamos una a una, para que las tenga todas por escrito.